domingo, 26 de septiembre de 2010

Heart of Midlothian (Edimburgo)


Lothian es una de las regiones en las que se subdivide Escocia y que se encuentra entre la costa meridional del estuario del Forth y las Lammermuir Hills, al sur de Escocia. El nombre de Lothian esta relacionado con el legendario rey Lot o Loth.

La región de Lothian dentro del mapa de Escocia (vía)

Históricamente, la region del Lothian se subdividía en tres condados: West Lothian ("Linlithgowshire"), Mid Lothian ("Edinburghshire") y East Lothian ("Haddingtonshire").


Actualmente, la ciudad de Edimburgo se encuentra desvinculada de la región de Mid Lothian y es un municipio independiente formado por la ciudad y 78 Km². de su entorno rural.

Vista de Edimburgo desde Calton Hill

Uno de los reductos que se conservan de cuando Edimburgo fue parte de la región de Mid Lothian es el famoso Heart of Midlothian, un corazón hecho de adoquines situado en el pavimento que marca el lugar donde se situaba el antiguo Tolbooth (centro administrativo, prisión y uno de los varios lugares de ejecución pública de la población) de Edimburgo, cerca de la puerta noroeste de la Catedral de St. Giles, en High Street.

El corazón de Midlothian

El edificio fue construido originalmente en 1561 para albergar el peaje/aduana para los comerciantes. Se convirtió en Ayuntamiento cuando el Privy Council (consejo privado que asesoraba al rey), el palacio de justicia y el Parlamento Escocés se unieron bajo un mismo techo. A mediados del siglo XVII se convirtió también en prisión y patíbulo.


El Tolbooth de Edimburgo ha pasado a la historia en parte gracias a Sir Walter Scott, que lo inmortalizó en su novela "The Heart of Midlothian", parte de la saga "Tales of My Landlord". Tanto interés mostró el escritor por el edificio que le fue concedido un permiso especial para conservar su puerta, que se puede observar en Abbotsford House, una de sus propiedades situada junto a la población de Melrose, en la frontera de Escocia, donde se ambientan algunas de sus novelas.

Muchos hombres fueron colgados en la horca o ajusticiados y sus cabezas ensartadas en picas que fueron colocadas en la pared norte del edificio, muchos de ellos sin juicio previo.


Tras cuatrocientos años de funcionamiento, el edificio fue demolido en 1817, pero se conserva el lugar donde se encontraba la horca donde se ajusticiaba a los condenados y que era considerado el kilómetro cero del Mid Lothian: el corazón de Midlothian.

También se pueden observar en el pavimento unos adoquines dorados que, en muchas ocasiones, van en una dirección diferente al resto. Marcan el lugar donde se situaban los muros del antiguo Tolbooth.


Una de las cosas que llama la atención al observar detenidamente el corazón de piedra, es que se encuentra cubierto de escupitajos.

El centro del corazón donde supuestamente hay que acertar.
¡No es recomendable situarse contra el viento!...

A pesar de que está prohibido escupir en cualquier parte de Edimburgo, se permite hacerlo dentro del corazón por tradición, cuyo origen no está del todo claro pudiendo tener varias explicaciones: por un lado se afirma que la gente del pueblo escupía en la puerta del Tolbooth por los elevados impuestos que debían abonar al Ayuntamiento; por otro, que los reos lo hacían como muestra de desprecio por su condena; mientras que en la actualidad y sobretodo a los turistas, se les dice que trae buena suerte... Una última teoría afirma que dado que uno de los equipos de fútbol local toma su nombre de este lugar, el Heart of Midlothian Football Club, es posible que parte de la saliva que vemos sobre el pavimento no sea sólo por alguno de los motivos anteriores, sino también de seguidores de alguno de los equipos rivales.


Sea como sea es un curioso testimonio del pasado en una ciudad cargada de historia como es Edimburgo.

Enlaces:
·The Old Tolbooth (inglés) y Heart of Midlothian (inglés) en Royal-Mile.com.
·Edinburgh, High Street, Tolbooth (inglés) en Royal Commission on the Ancient And Historical Monuments of Scotland.

martes, 7 de septiembre de 2010

Capillas Médici (Florencia)



Ríos y ríos de tinta se han escrito sobre los Médici, una familia florentina que, a pesar de su origen humilde, llegó a alcanzar un enorme poder político en toda Europa. La saga dio lugar a tres papas, León X, Clemente VII y León XI, numerosos dirigentes de Florencia, y miembros de la familia real de Francia e Inglaterra. Grandes mecenas del arte, financiaron gran parte de la arquitectura renacentista que ahora admiramos en la ciudad de Florencia, así como las actividades de muchos artistas notables como Donatello o Miguel Ángel. Del espíritu coleccionista de esta familia surgió la colección central de la Galería Uffizi, uno de los referentes del arte mundial por la cantidad de obras que alberga.
Como no podía ser de otra manera, los Médici tuvieron su propia iglesia para reflejar el gran poder que ejercían: la basílica de San Lorenzo, en Florencia. Su construcción fue encargada en un principio al arquitecto Filippo Brunelleschi por ocho influyentes familias florentinas con la idea de que su interior albergara una capilla para cada una de ellas, pero al no poder hacerse cargo la mayoría de dichas familias del gran dispendio que ocasionaron los gastos de la construcción, Cosme de Médici decidió adquirirla en solitario para su familia.


La basílica de San Lorenzo es una tremenda obra arquitectónica, pero en este caso queremos mostraros simplemente parte de lo que alberga su interior, fiel reflejo de la impresionante influencia de los Médici en la historia de Florencia en forma de las Capillas Médici. Éstas espléndidas y ostentosas capillas comprenden tres partes: la Cripta, la Capilla de los Príncipes y la Sacristía Nueva.


La Cripta, diseñada por Bernardo Buontalenti y primer lugar al que accedemos tras el religioso pago de la correspondiente entrada, alberga el mausoleo de los miembros menores de la familia Médici (duques, sus consortes y familiares).


Es la más sobria en cuanto a obras de arte y guarda un secreto que muchos desconocen: los restos de aquellos allí enterrados están amontonados sin distinción uno de otro ya que el gran duque Fernando III de Lorena dio orden de disponerlos de cualquier manera tras la remodelación que se hizo en 1791, con el fin de hacer una cripta especial para los grandes duques de su propia familia y en la que se trasladó la puerta de entrada a su actual ubicación.

Actual puerta de acceso a las capillas (vía)

Desde allí y a través de una escalinata, accedemos a la Capilla de los Príncipes, una sala de planta octogonal de 28 metros de diámetro cubierta por una cúpula monumental y cuyas paredes de ricos mármoles están tachonadas de piedras semipreciosas.

Cúpula de la Capilla (vía)

Esta capilla fue idea de Cosme I, realizada por Fernando I de Médici y diseñada por Matteo Nigetti. Aquí se hallaban enterrados los Grandes Duques Fernando II, Cosme II, Fernando I, Cosme I, Francisco I y Cosme III en monumentales sarcófagos de granito egipcio, jaspe verde de Córcega y granito oriental. En la actualidad, los seis sarcófagos están vacíos ya que los restos de los Médici están enterrados en la cripta inferior.

Sarcófago de Fernando I

El lugar está presidido por un altar de “pietra dura” elaboradas en el “Opificio delle Pietre Dure”. Asimismo, la taracea de los zócalos, realizada con piedras semipreciosas, madreperla, lapislázuli y coral, reproduce los blasones de dieciséis ciudades toscanas. Como curiosidad hacer notar que la capilla no fue del agrado de los visitantes de los siglos XVIII y XIX. Cuando nosotros visitamos la Capilla de los Príncipes ésta estaba en restauración.

La ostentosa Capilla de los Príncipes (vía)

Desde un lateral de esta capilla, se accede a la Capilla del Tesoro, donde se guardan valiosas piezas de orfebrería de los siglos XVII y XVIII y reliquias de varios santos. Debemos decir que en dicha sala se capta un cierto hedor propio de una cripta.

Altar de la capilla (vía)

Unida a la Capilla de los Príncipes por un corredor, encontramos la Sacristía Nueva, diseñada por Miguel Ángel y lugar al que daba paso inicialmente la entrada original.

Visión del conjunto con el altar en primer plano, la sepultura doble de Lorenzo "el Magnífico" y Juliano enfrente, Lorenzo II a la izquierda y Juliano II a la derecha (vía)

Fue planeada por el cardenal Juliano de Médici y su primo el papa León X como un mausoleo para miembros de la familia y se convirtió en el primer intento arquitectónico de Miguel Ángel, que también proyectó las figuras escultóricas y la fachada de la iglesia. Desafortunadamente, Miguel Ángel nunca llegó a terminarla debido a varias circunstancias, entre ellas el exilio temporal de los Médici en 1527, la muerte de Juliano (entonces ya papa Clemente VII) o el traslado definitivo de Miguel Ángel a Roma en 1534. El proyecto fue finalmente ejecutado por Bartolomeo Ammannati y Giorgio Vasari en 1550. A pesar de ello la fachada quedó sin completar.

La fachada de San Lorenzo permanece inacabada aún hoy en día (vía)

Se habían planeado cuatro tumbas en ese espacio, pero nunca se emprendieron las de Lorenzo el Magnífico y su hermano Juliano de Médici (asesinado en la "conjura de los Pazzi"), siendo éstos enterrados modestamente en un desornamentado sarcófago doble frente al altar. El resultado es que las dos magníficas tumbas que existen hoy son de dos Médici relativamente insignificantes: Lorenzo de Pedro, duque de Urbino, cuya tumba está flanqueada por las figuras del Crepúsculo y la Aurora;...

Lorenzo II de Médici (vía)

... y Juliano de Lorenzo, duque de Nemours, con las alegorías del Día y la Noche.

Juliano II de Médici (vía)

Curiosamente las esculturas de dichas sepulturas no miran al altar como sería normal sino al sarcófago de Lorenzo el Magnífico y Juliano. Podemos encontrar también, sobre una pared inacabada, la Virgen con Niño de Miguel Ángel flanqueada por los santos patrones de los Médici, San Cosme y San Damián.

Sarcófago doble de Lorenzo "el Magnífico" y su hermano Juliano (vía)

Bajo la basílica otra cripta, donde se encuentran las tumbas de Cosme el Viejo, empotrada en el pilar central, y la de Donatello, un buen amigo y consejero sobre arte del fundador de la saga Médici, cuya lápida fue colocada en el siglo XVIII.

Lápida frente al altar de la iglesia bajo la cual está la cripta donde yace Cosme "el Viejo" (vía)

Columna de la cripta en la que yace sepultado Cosme "el Viejo" (vía)

En definitiva, las capillas Médici no dejan a nadie indiferente. Son ostentosas y recargadas, como lo fue la vida de esta familia que marcó la historia de Europa durante varios siglos. Tanto ha perdurado su fama que todavía interesan sus “intrigas palaciegas” y en 2004 se comenzaron a exhumar sus restos para investigar, no sólo las causas de su muerte, sino también el modo de vida que llevaron antes de ser sepultados.

Como broche final, decir que es uno de esos sitios en los que está prohibido hacer fotos...


Capillas Médici
Plaza Madonna degli Aldobrandini, 6, Florencia
Horario de abertura: de martes a sábado (mas el 1°,3°,5° domingo y 2°,4° lunes de cada mes) desde la 8.15 a las 3pm
Teléfono: 055 294883
Precio: 6 €

Enlaces:
·Capelle Medicee en el Firenze Musei (italiano).
·Progetto Medici en la Facoltà di Medicina e Chirurgia dell'Università di Firenze (italiano).
·Resultados de las investigaciones del proyecto Medici en paleopatologia.it (italiano).
·La historia de la familia Médici en mgar.net.
·La Sacristia Nueva en 360° vía arquitecturaliquida.com.ar (es necesario tener instalado QuickTime).